sábado, 23 de abril de 2011

Diferencias neuroanatómicas entre autismo y síndrome X frágil

Los distintos patrones neuroanatómicos que existen entre el síndrome X frágil (SXF) y el autismo son por causa desconocida, aunque ambos trastornos parecen compartir conductas que se superponen.

En un estudio comparativo con 165 niños varones, que ha sido publicado en la revista Archives of General Psychiatry, lse ha observado que, en comparación con los controles sanos, los niños diagnosticados como SXF o autismo idiopático (AUTi) presentaban diferencias significativas en la materia gris y blanca en regiones frontales y temporales, a menudo asociadas con la cognición social. Sin embargo, el grupo AUTi mostraba un mayor volumen en estas regiones que los controles, y también que el grupo SXF. Concretamente, en comparación con el grupo control, la corteza prefrontal media, la corteza orbitofrontal, la región temporal superior, el polo temporal, la amígdala, la ínsula y el cíngulo dorsal se encuentran significativamente reducidas en aquellos con SXF y aumentadas significativamente en los pacientes con AUTi. Los investigadores también encontraron que, en general, los patrones morfométricos del cerebro de los individuos con AUTi se parecía más a los de los controles que a los que tienen SXF.

Fuente: Neurologia.com

jueves, 14 de abril de 2011

Las personas con autismo desarrollan mas la zona del cerebro que controla la información visual


Uno de los principales objetivos de médicos y científicos con respecto al autismo es lograr que las personas que viven con esta condición puedan integrarse sin problemas a la sociedad, especialistas de la Universidad de Montreal pueden aportar datos útiles sobre el tema.


En un estudio que acaban de publicar, descubrieron que las personas con autismo utilizan el cerebro de forma distinta. Esto, señalan, podría ser la clave que explique porque personas con autismo suelen tener capacidades extraordinarias para recordar y dibujar objetos en detalle.

Los especialistas trabajaron en la recolección de datos durante 15 años y concluyeron que el cerebro de las personas con autismo se organiza de una forma diferente al del resto de los individuos.
 
Los resultados de la investigación, que se publicaron en Human Brian Mapping, señalan que las zonas cerebrales que controlan la información visual están más desarrolladas en los autistas, mientras que las zonas que determinan la toma de decisiones y la planificación, tienen menos capacidad.

Este resultado, podría ser un avance concreto en la forma en que se puede enseñar a leer y escribir a los autistas, comentó el Dr. Laurent Mottron, quien dirigió el estudio.
 
El especialista dice que por tendencia se suele pensar que el autismo es una forma de desorganización, pero lo que descubrieron es que reorganiza de una manera diferente.

La Dra. Christine Ecker, Otra experta en el tema, quien trabaja en el Instituto de Psiquiatría del King’s College de Londres, destaca el valor del estudio: “Nos ayuda a entender el comportamiento de las personas con autismo”, porque esta condición no debe verse sólo como un trastorno de dificultades conductuales, también puede asociarse con una habilidad en particular”.
 
Carol Povey, de la Sociedad Nacional de Autismo del Reino Unido, dice que mientras más información se tenga sobre el proceso sensorial del autismo se beneficiarán más personas con la condición, sus familias y los profesionales de la salud podrán trabajar en el desarrollo de estrategias para facilitar la vida diaria.

Fuente Original: SuMedico.com



miércoles, 6 de abril de 2011

Según un estudio, la evidencia que respalda a muchos fármacos para el autismo es débil


-Poca evidencia respalda el uso de la mayoría de los medicamentos para tratar el autismo en los niños, con la excepción de los fármacos antipsicóticos risperidona y aripiprazole, que han mostrado éxito en el control de las conductas gravemente perturbadoras, hiperactivas y repetitivas, según muestra un estudio reciente.
 
Sin embargo, los antipsicóticos pueden tener efectos secundarios significativos, lo que incluye un aumento de peso sustancial, sedación y temblores o rigidez, y sólo deben usarse cuando sea absolutamente necesario, añadieron los investigadores.
 
"Los medicamentos son eficaces, pero tienen efectos secundarios significativos que deben limitar su uso a pacientes con impedimentos graves o en riesgo de lesión", apuntó la autora del estudio Melissa McPheeters, codirectora del Centro de Prácticas Basadas en la Evidencia Vanderbilt, en Nashville.

Otros medicamentos que a veces se recetan a niños autistas, que incluyen inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS) para tratar conductas repetitivas y estimulantes usados para tratar la hiperactividad y la conducta repetitiva, cuentan con poca evidencia que respalde su uso, según el estudio. El estudio aparece en la edición en línea del 4 de abril de la revista Pediatrics.

Y un ensayo aleatorio y controlado sobre los ISRS no mostró beneficios en el control de las conductas repetitivas, según el estudio. Y aunque un estudio sí mostró que los estimulantes podrían ayudar con la hiperactividad, se necesita mucho más investigación.

Un segundo estudio en la misma edición de la revista analizó siete ensayos aleatorios controlados sobre la secretina, que se usa para tratar las úlceras pépticas, y el estudio no encontró beneficios en el tratamiento de los síntomas de autismo, y ni siquiera ameritó más estudio. (Los estudios en animales han mostrado que la secretina afecta al sistema nervioso central, lo que despertó el interés en el uso del fármaco en niños autistas. Pero esas esperanzas no han resultado, apuntaron los investigadores).

Un tercer estudio de la revista observó 34 estudios sobre intervenciones conductuales en preescolares. La investigación por lo general muestra que esas intervenciones ayudan a los niños a mejorar sus habilidades de lenguaje y sociales, pero la mayoría de estudios estuvieron mal diseñados, y se necesita más investigación, apuntaron los autores del nuevo estudio.
 
"Vemos una variabilidad real en la respuesta. Algunos subgrupos tienen efectos dramáticamente positivos y algunos niños siguen muy discapacitados", apuntó McPheeters.
 
Se calcula que uno de cada 110 niños de EE. UU. sufre de un trastorno del espectro autista, que con frecuencia se caracterizan por problemas con las habilidades de lenguaje, sociales y de comunicación, y conductas repetitivas.

Pero la afección puede variar ampliamente entre los individuos. Algunas personas nunca desarrollan la capacidad de hablar, mientras que otras van a la universidad.
 
"Este trío de artículos de revisión es importante ya que recuerdan a padres y profesionales lo difícil que es tratar a los niños autistas de forma eficaz, la poca investigación que hay para respaldar algunas de nuestras intervenciones médicas y del desarrollo, y lo desafiante que es llevar a cabo investigación clínica bien diseñada de forma eficiente", señaló el Dr. Andrew Adesman, jefe de pediatría del desarrollo y conductual del Centro Médico Pediátrico Steven and Alexandra Cohen de Nueva York.
 
Los niños autistas con frecuencia también sufren de otras afecciones, como conductas agresivas o perturbadoras, trastornos convulsivos e hiperactividad. Ningún medicamento se dirige a los problemas de comunicación o con el funcionamiento social que definen al autismo en sí, apuntaron los expertos. En vez de ello, los médicos recetan fármacos para intentar aliviar esas otras afecciones.
 
"Los medicamentos se usan para tratar los síntomas comórbidos, no los síntomas centrales del autismo", explicó McPheeters.

En la revisión, los investigadores observaron estudios llevados a cabo entre 2000 y 2010 sobre el uso de varios medicamentos en niños de hasta doce años de edad que sufrían de un trastorno del espectro autista. El estudio sobre los medicamentos incluyó a nueve investigaciones sobre antipsicóticos, cinco sobre ISRS, y cuatro sobre estimulantes.

Aunque la evidencia para los antipsicóticos es potente, se necesita mucho más investigación sobre los nuevos antipsicóticos que podrían tener menos efectos secundarios, apuntó McPheeters.

En cuanto a las intervenciones conductuales tempranas, "contamos con un reducido número de investigaciones que sugieren resultados positivos, pero hay una necesidad crítica de estudios de replicación, extensión y controlados", comentó McPheeters.
 
Añadió que "aunque el artículo afirma que la potencia de la evidencia es baja e insuficiente, eso no debe interpretarse como que las intervenciones no son eficaces, sino como una exhortación a investigación adicional".

Los tres estudios formaron parte de un proyecto de 18 meses de duración llevado a cabo en conjunto con la Agencia para la Investigación y la Política de Atención de Salud para revisar toda la evidencia sobre tratamientos para los trastornos del espectro autista en niños de hasta doce años publicados tras 2000, apuntó McPheeters, autora principal del informe que será publicado en el sitio web de dicha agencia.

El informe comenzó con más de 4,000 resúmenes, y se redujo a un total de 183 estudios.

Para el estudio sobre los medicamentos, las investigaciones tenían que incluir a al menos treinta personas, mientras que para el estudio conductual, debían incluir a al menos diez.
 
"El informe incluye estudios que son muy rigurosos, y también estudios que se consideraron de baja calidad", dijo McPheeters. "Creíamos que era importante cubrir todo el terreno para que la gente pudiera ver todo lo que había".

Otro desafío para los médicos es determinar qué niños responderán mejor a qué tratamiento, comentó el Dr. Eric Hollander, director del Programa de Trastornos Compulsivos, Impulsivos y del Espectro Autista del Centro Médico Montefiore de la ciudad de Nueva York.

"Ningún tratamiento en particular funciona para todos los pacientes", señaló Hollander.


FUENTES: Melissa McPheeters, Ph.D., M.P.H., co-director, Vanderbilt Evidence-based Practice Center, and deputy director, Women's Health Research Institute for Medicine and Public Health, Vanderbilt University Medical Center, Nashville; Andrew Adesman, M.D., chief, developmental and behavioral pediatrics, Steven and Alexandra Cohen Children's Medical Center of New York, New Hyde Park, N.Y.; Eric Hollander, director, Compulsive, Impulsive and Autism Spectrum Disorders Program; Montefiore Medical Center, New York City; April 4, 2011, Pediatrics, online

HealthDay


Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare

viernes, 1 de abril de 2011

2 ABRIL 2011 : 4º AÑO DIA MUNDIAL DE CONCIENCIACION DEL AUTISMO

MENSAJE DE LA ONU ACERCA DEL DIA MUNDIAL DEL AUTIMO 2011

El número de niños y adultos con autismo sigue en aumento, en todos los países y en todos los grupos raciales, étnicos y sociales. Pese a que cada vez se presta mayor atención al autismo en el mundo de las ciencias, la medicina y la asistencia, la opinión pública no es muy consciente de la enfermedad. De ahí que la celebración anual del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo cobre un relieve aún mayor ya que representa una oportunidad para fomentar la adopción de medidas y la prestación de asistencia.

Los niños y los adultos con autismo se enfrentan a los graves problemas del estigma y la discriminación, y a dificultades para acceder a la asistencia. Muchos tienen que luchar contra múltiples obstáculos, día a día. La discriminación, los malos tratos y el aislamiento afectan terriblemente a muchos de ellos y constituyen una violación de sus derechos humanos fundamentales.

El autismo es un trastorno complejo, pero con un tratamiento rápido y adecuado se puede lograr, en muchos casos, un mejoramiento. Es por ello que es tan importante informar acerca de los síntomas del autismo y ofrecer tratamiento lo antes posible.

También es esencial prestar apoyo a los padres, crear puestos de trabajo para las personas con autismo acordes a sus capacidades y sus puntos fuertes, y mejorar la enseñanza pública para responder más adecuadamente a las necesidades de los estudiantes con autismo.

Estas medidas redundarán en beneficio de todos y enriquecerán la vida de las personas con autismo y la de sus familias, así como la de todos los demás miembros de la sociedad por igual. En palabras de la madre de una niña autista: “Mi hija ha recorrido un largo camino, pero el mío ha sido aún más largo”.

Emprendamos juntos este camino hacia un mundo más generoso e incluyente.

Ban Ki-moon
Secretario General


EL AUTISMO PIEZA A PIEZA

Y una vez mas gracias a Maite Hasta la luna ida y vuelta  podemos aprender una nueva vision del autismo. Mil gracias


 

Año 2017.... Adolescencia

Cuanto tiempo hacia que no me pasaba por el blog, casi no lo recuerdo. En este tiempo han pasado muchísimas cosas…. Pablo ya tiene 14 a...